Miércoles 14 Mayo •St Matthias, Apostle
Presencia
Cuanto más invocamos al Señor, más podemos sentir Su presencia. Día tras día, Él nos acerca a Su corazón amoroso.
Libertad
«Soy libre».
Cuando miro estas palabras por escrito,
parecen crear en mí un sentimiento de asombro.
Sí, un maravilloso sentimiento de libertad.
Gracias, Dios.
Conciencia
Pregunto cómo estoy hoy dentro de mí.
¿Estoy especialmente cansado, estresado o fuera de forma?
Si se da alguna de estas condiciones,
¿puedo intentar desprenderme de las preocupaciones que me perturban?
La Palabra de Dios
Juan 15:9-17 LBLA9Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor. 10Si Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. 11Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea perfecto.
12Este es mi mandamiento: que os améis los unos a los otros, así como yo os he amado. 13 Nadie tiene un amor mayor que este: que uno dé su vida por sus amigos. 14Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando. 15Ya no os llamo siervos,porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque os he dado a conocer todo lo que he oído de mi Padre. 16 Vosotros no me escogisteis a mí, sino que yo os escogí a vosotros, y os designé para que vayáis y deis fruto, y que vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo conceda. 17Esto os mando: que os améis los unos a los otros.
Inspiración
El verdadero amor se demuestra con hechos más que con palabras. Nuestro Señor redujo todos los mandamientos a dos, e incluso éstos son en realidad el único gran mandamiento del amor. Amamos a Dios y al prójimo con un solo corazón. De eso se trata nuestra vida en la Tierra, de desarrollar la capacidad de amar que Dios nos ha dado, para que al final podamos fundirnos con Dios, que es Amor.
Jesús nos invita a todos a una amistad íntima con él. En esta relación, se nos revelará y compartirá con nosotros, como hizo con sus apóstoles, lo que ha aprendido de su Padre. La oración es siempre una invitación, y de nosotros depende responder a ella.
Conversación
«Le miraba y le quería». (Marcos 10:21). ¿Puedo permitirme sentarme ante la mirada amorosa de Jesús, que me ama en todo momento y lugar, en toda circunstancia? Dios siempre me mira con amor incondicional.
Conclusión
Doy gracias a Dios por estos pocos momentos que hemos pasado juntos a solas y por cualquier detalle que se me haya dado sobre el texto.
Amén
Copyright © 1999-2025 Sacred Space. All rights reserved.
Espacio Sagrado es un ministerio de los jesuitas irlandeses.