Retiro de Adviento en Espacio Sagrado 2024
Comencemos juntos nuestro camino de Adviento, orando cada día con la Escritura y en la Presencia de Aquel a quien esperamos. El Adviento es una oportunidad para pasar tiempo descansando tranquilamente en los brazos amorosos de Dios y reflexionando sobre la maravilla y el misterio de Jesús. Es un momento perfecto para renovar nuestra fe, esperanza y amor, reflexionar sobre nuestras relaciones con nosotros mismos, con los demás y con Dios, y centrarnos en lo que más importa en la vida. Que este retiro de Adviento bendiga a cada uno de los que rezan con él y les recuerde que forman parte de la familia del Espacio Sagrado, unidos en la oración con hermanos y hermanas de todo el mundo. Recordemos a todos los que sufren más profundamente en todo el planeta en este momento, especialmente a los que se encuentran en zonas de conflicto y de guerra, y elevemos nuestras oraciones por ellos.
Rezar con el Retiro
Este retiro tendrá nuevas oraciones y reflexiones diarias. El retiro puede durar tan sólo 3-5 minutos, o 15-20 minutos, o más, dependiendo del tiempo de que dispongas y de lo profundamente que quieras adentrarte en la oración. El retiro también está disponible en versión audio, que puedes escuchar haciendo clic en el icono 
. Te invitamos a que pases todo el tiempo que puedas con cualquier cosa que te llame la atención de las reflexiones o de las propias escrituras y dejes que se instalen profundamente en tu corazón, en tu mente y en tu alma. Utiliza este retiro de la forma que más te convenga, tomando notas o escribiendo en un diario, quedándote con la palabra o frase que más te resuene. Si te pierdes un par de días, puedes incorporarte en el punto en que se encuentre el retiro o volver atrás y ponerte al día si lo prefieres.
El Retiro comienza el 1 de diciembre de 2024
Sobre el autor
Helen Gallivan es consultora de entrevistas de selección de personal y contratación, con sede en Dublín. Es cofundadora, junto con John Dundon, del sitio web Nuevo Camino del Peregrino, que presenta a compañeros cristianos de todas las confesiones la riqueza de los recursos espirituales disponibles en Internet. El sitio, que cumple 8 años, tiene seguidores de todo el mundo angloparlante. Es autora de dos libros, El templo interior (Columba Press) y Amanecer sin oscuridad (Veritas). Tiene una larga relación con el Espacio Sagrado y anteriormente presidió el Grupo Asesor del Espacio Sagrado, que proporcionó dirección estratégica para la continua expansión del sitio.
Images: © Hannah-Alice Loughlin https://www.linkedin.com/in/hannah-alice-loughlin/
Nunca debemos caminar solos
«Consuélate. No estarías buscándome si no me hubieras encontrado ya». Comenzamos este retiro de Adviento seguros de ese pensamiento, expresado por el matemático y filósofo religioso francés del sigloXVII, Blaise Pascal, tras una profunda experiencia mística en noviembre de 1654. Desde entonces, sus palabras han sido un faro para muchos en los tiempos más oscuros. Y, en efecto, corren tiempos oscuros en nuestro mundo.
En una época de grandes cambios, la conexión con un pasado compartido puede ser enormemente útil para ayudar a mantener nuestra estabilidad. Sin embargo, podemos vernos poseídos por nuestro propio pasado, especialmente por nuestros fracasos pasados, que nos restan confianza para seguir adelante.
El viaje que hacemos desde el nacimiento hasta la muerte y el renacimiento se ha realizado una y otra vez durante incontables milenios. Nadie puede hacerlo por nosotros, aunque innumerables personas lo hayan hecho antes que nosotros. Aunque sólo yo puedo recorrer mi propio camino, no necesito caminar solo. En cualquier viaje, sirve tener una guía.
La Biblia nos proporciona una compañía numerosa y muy variada de quienes hicieron el camino de la salvación antes que nosotros: Abraham, Moisés, Jonás, Jacob, Nicodemo, el rey David, Job, Elías, la mujer de Lot, María Magdalena. Todo está aquí: la aparente ausencia y el silencio de Dios, la prosperidad de los malvados, el espíritu quebrantado, la furia contra el destino. Pero, subyacente a todo ello, está la negativa a rendirse, la negativa a callar: la misma capacidad de resistencia que marcó incluso al más imperfecto de los protagonistas bíblicos. También encontraremos guías más recientes, como Meister Eckhart, Teresa de Ávila, San Juan de la Cruz, Pierre Teilhard de Chardin y CS Lewis.
Lo que todos estos viajes tienen en común es que cada uno de ellos presenta una crisis, en el sentido original de la palabra griega, «punto de inflexión», algo que hay que agradecer en lugar de temer, algo que el filósofo Ivan Illich describió en su libro El derecho al desempleo útil como «el momento maravilloso en que las personas toman conciencia de sus jaulas autoimpuestas y de la posibilidad de una vida diferente».
Las experiencias que vivieron estas personas, los conflictos que encontraron, las rutas que trazaron, son tan relevantes hoy como lo eran cuando se contaron sus historias por primera vez. Al embarcarnos en este viaje de Adviento, empujaremos para abrir las puertas de nuestras propias jaulas, guiados diariamente por su conocimiento y experiencia
Al final del Adviento esperamos escuchar las palabras de Moisés a los israelitas cuando salen del desierto después de 30 años, y comprender que: «El Dios eterno es vuestro refugio, y debajo están los brazos eternos». (Dt 33,27). Sabremos que los ángeles nos han servido sin que nos diéramos cuenta. Y, como Cristo pasó por la misma experiencia del desierto, podremos consolarnos sabiendo que Él es tanto el Camino como el Caminante.
