Sentido de Pertenencia
Precisamente por su experiencia vital, San Ignacio de Loyola vio con gran claridad que todo cristiano está implicado en una batalla que define su vida. Es una lucha por superar la tentación de encerrarnos en nosotros mismos, para que el amor del Padre pueda hacer su morada en nosotros. Cuando dejamos espacio al Señor, que nos rescata de nuestra autosuficiencia, nos abrimos a toda la creación y a toda criatura. Nos convertimos en canales de la vida y del amor del Padre. Sólo entonces nos damos cuenta de lo que es realmente la vida: un don del Padre, que nos ama profundamente y desea que le pertenezcamos a él y a los demás». Papa Francisco
Extraído del prólogo de Primero pertenecer a Dios de Austen Ivereigh