Mateo 16:13-20 NRSVue

13En aquel tiempo, cuando llegó Jesús a la región de Cesarea de Filipo, hizo esta pregunta a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?» 14Ellos le respondieron: «Unos dicen que eres Juan, el Bautista; otros, que Elías; otros, que Jeremías o alguno de los profetas». 15Luego les preguntó: «Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?» 16 Simón Pedro tomó la palabra y le dijo: «Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo». 17Jesús le dijo entonces: «¡Dichoso tú, Simón, hijo de Juan, porque esto no te lo ha revelado ningún hombre, sino mi Padre, que está en los cielos! 18Y yo te digo a ti que tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Los poderes del infierno no prevalecerán sobre ella. 19Yo te daré las llaves del Reino de los cielos; todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo». 20Y les ordenó a sus discípulos que no dijeran a nadie que él era el Mesías.,


Reflexión on Mateo 16:13-20

Inspiración - 2023-08-27 Oración diaria

Jesús pregunta por lo que dicen los demás, pero lo importante para él es lo que dice Pedro. Puede que acuda a la oración motivado para rezar por los demás, pero Dios quiere que esté en contacto conmigo mismo; la oración es la conversación entre mi corazón y el corazón de Dios.

Jesús no era, para Pedro, otra figura grandiosa o admirable, sino que era Aquel que podía cambiar su vida. Doy testimonio de quién es Jesús en mi vida, no sólo en lo que digo, sino en cómo dejo que Jesús cambie y reconfigure mis prioridades, y en cómo vivo y afronto cada día.