Mateo 6:7-15 LBLA

7Y al orar, no uséis repeticiones sin sentido, como los gentiles, porque ellos se imaginan que serán oídos por su palabrería. 8Por tanto, no os hagáis semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe lo que necesitáis antes que vosotros le pidáis.

9Vosotros, pues, orad de esta manera:

«Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.

10Venga tu reino. Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo. 11Danos hoy el pan nuestro de cada día., 12Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores. 13Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre jamás. Amén».,

14Porque si perdonáis a los hombres sus transgresiones, también vuestro Padre celestial os perdonará a vosotros. 15Pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre perdonará vuestras transgresiones.


Reflexión on Mateo 6:7-15 LBLA

Inspiración - 2025-06-19 Oración diaria

La oración no es una cuestión de palabras, sino de encuentro con una Persona. Cuando acudimos a Él en la oración, ¿valoramos realmente su compañía? ¿Lo expresamos con palabras de corazón, o nos limitamos a recitar palabras que hemos aprendido de memoria en la infancia? El Papa Francisco escribió: «Para cada discípulo es esencial pasar tiempo con el Maestro, escuchar sus palabras y aprender siempre de él… Así que permíteme que te pregunte: ¿Hay momentos en los que te colocas tranquilamente en la presencia del Señor, en los que pasas tranquilamente tiempo con él, en los que te deleitas en su mirada?’